¿Cuáles son los principios de la nueva norma ISO 31000?
ISO 31000
El principal objetivo de la gestión de riesgos es la creación y protección del valor. Mejora el rendimiento fomenta la innovación y apoya el logro de los objetivos.
El principal objetivo de la gestión de riesgos es la creación y protección del valor. Mejora el rendimiento fomenta la innovación y apoya el logro de los objetivos.
La norma ISO 31000 se utiliza para generar y proteger el valor en las empresas mediante la gestión de riesgos, tomar decisiones, establecer y conseguir objetivos, además de mejorar el rendimiento.
Las empresas deben identificar todos los riesgos, no solo los considerados como clave, además deberán gestionarlos de forma eficaz, analizarlos y aprender de dicho riesgo en cuanto a su eliminación o reducción.
La norma ISO 31000, desde su creación, ha sido un gran aliado para las organizaciones que se encuentran en dicha situación, ya que aporta un enfoque general y objetivo de la gestión del riesgo, no importa el tamaño, el tipo de riesgo, características o localización de la organización. Por este motivo se puede decir que la norma se encuentra relacionada con las oportunidades que tienen las organizaciones y pueden aprovechar las amenazas que le pueden generar dichas pérdidas.
Está pendiente la publicación de la revisión de la ISO 31000 sobre la Gestión del Riesgo que, posiblemente, tendrá lugar a principios del próximo año 2018.
Las organizaciones que gestionan riesgos de manera eficaz, tienen mayores posibilidades de protegerse y de tener éxito en la expansión de sus negocios, y en el desarrollo organizacional. La Gestión de Riesgos ISO 31000 y sus beneficios, es el tema de nuestra entrada de hoy.
Monitorear y revisar los criterios del riesgo en ISO 31000 es la última etapa dentro de una estrategia exitosa de gestión del riesgo, tras la implementación de la norma ISO 31000. Esto implica, la adecuación de los criterios, el análisis, el tratamiento y el marco propiamente dicho.
Cuando hablamos de la norma ISO 31000 no podemos decir que se trate de una norma con un largo pasado, pues su primera versión apareció en el año 2009. No obstante, la necesidad de adaptarla a la situación del mercado actual y de las organizaciones, así como la de facilitar su uso puso en marcha la revisión de la misma.
Las amenazas, incertidumbres y riesgos a los que se encuentran sometidas las actividades que realizan las empresas, sin importar su diligencia o tamaño, son conocidas en la actualidad como “Gestión del Riesgo”. Este es un término utilizado para referirse de forma específicamente a accidentes operacionales, enfermedades, incendios o catástrofes naturales, entre otros, que pueden afectar a la consecución de los objetivos de cualquier organización. Una de las estrategias de reacción es la norma ISO 31000.
Las empresas y organizaciones que llevan a cabo una gestión de los riesgos de manera eficaz cuentan con más posibilidades a la hora de protegerse de estos y lograr el éxito en el crecimiento de sus negocios. Para toda organización, el reto consiste en lograr integrar buenas prácticas en sus actividades diarias y aplicarlas al mayor número de operaciones de la empresa.
Las organizaciones que gestionan sus riesgos de manera eficaz cuentan con más posibilidades para protegerse y tener éxito en el crecimiento de su actividad. El desafío para cualquier organización es conseguir integrar las buenas prácticas en sus operaciones diarias y aplicarlas al mayor número de elementos de su práctica organizativa.