| 25 años generando CONFIANZA
Clima laboral
Del mismo modo que el término «clima» sirve para señalar una serie de características meteorológicas estables en una región geográfica, el «clima laboral» tiene que ver con los vínculos y las relaciones interpersonales que definen los espacios internos en los que operan las empresas.El término ha sido estudiado desde mediados del siglo XX, sobre todo a raíz de las aportaciones de autores como Kurt Lewin o Francis Cornell, que fueron los primeros en explorar la relación entre entorno y desempeño empresarial.
Actualmente, el clima laboral suele referirse al medio en el que operan las empresas. Es decir, al espacio cotidiano, el escenario compartido por todos aquellos que pertenecen a una misma organización y del cual dependen, en gran medida, el éxito o el fracaso de los planes que se pongan en marcha.
No obstante, es un concepto que engloba no sólo categorías humanas; también incluye otras como el manejo social de los directivos, la calidad de los espacios, las herramientas y recursos que se emplean y hasta los modelos de contratación y remuneración.
Mejorar el clima laboral. ¿Qué beneficios supone?
Los procesos de mejora del clima laboral en una empresa suelen ir de la mano de la aplicación de estándares de calidad y responsabilidad corporativa.
Es el caso de la norma ISO 26000, que se encarga describir los procesos que garanticen un nivel mínimo de responsabilidad social en las prácticas de las compañías, no sólo hacia el entorno en el que operan sino también de manera intrínseca. Esto se traduce en estructuras más eficaces y procesos inteligentes.
También es preciso mencionar la norma ISO 9001, mundialmente conocida por poner el foco en la gestión de la calidad. En este caso, la relación con el clima laboral es más directa: sin un entorno óptimo, es imposible aspirar al mejoramiento de los procesos.
Con todo y esto, vale la pena aclarar que cada organización aplica las estrategias que le resulten más convenientes en aras del mejoramiento de su clima laboral. No hay una única receta en ese sentido. Por el contrario, hay tantas fórmulas como necesidades, estructuras y culturas corporativas.
Lo que sí puede definirse con certeza son los principales beneficios que puede suponer la aplicación de un proceso de mejora del clima laboral, independiente del sector o la naturaleza de las empresas. Veamos algunos de los más significativos:
1) Productividad:
Los entornos laborales óptimos conducen a niveles de satisfacción permanentes. Y esa satisfacción se traduce, en términos prácticos, en una mejora de la productividad de los trabajadores: tanto en los tiempos como en la gestión de los recursos.
2) Comunicación óptima:
Un indicador directo de los climas labores óptimos es la eficacia de la comunicación de los miembros que los componen. Si los mensajes no circularan con fluidez, coherencia y oportunidad, los resultados serían negativos. Pero cuando son positivos, se convierten en vehículos para el crecimiento personal y profesional de los empleados.
3) Sentido de pertenencia:
Las características de los espacios también determinan el vínculo de las personas hacia las empresas. Cuando a los empleados se les toma en cuenta y se delega en ellos tareas o funciones relevantes, su nivel de compromiso aumenta; en los mejores casos, sienten como propia la identidad corporativa.
4) Resolución de conflictos:
Los buenos climas laborales no están exentos de conflictos. Sin embargo, su capacidad de respuesta es mayor que en espacios desfavorables, donde todo tiende a empeorar. La clave está en la prontitud y agilidad para el planteamiento de soluciones y en diseñar protocolos para la resolución de conflictos internos.
5) Formación de líderes
El surgimiento de líderes o la aparición de nuevos talentos y capacidades en algunos empleados sólo son propios de climas laborales óptimos. En estos casos, la estructura de la organización y el sistema de relaciones juegan un papel determinante: su objetivo es gestionar dichos talentos, capacitarlos y saber de qué manera puede extraer de ellos el mayor beneficio sin comprometer la estabilidad de los empleados.
Cómo mejorar el clima laboral de tu empresa con ISOTools
Existen diversas estrategias que te ayudarán a conseguir un clima laboral positivo dentro de tu organización. Conocer a tus trabajadores, mejorar los canales de comunicación o llevara a cabo una gestión eficaz del talento, son algunos de los métodos que puedes poner en marcha.
Si deseas optimizar estas estrategias, puedes seleccionar herramientas que colaboren a alcanzar tus metas, como es el caso de ISOTools, un recurso tecnológico que te ofrece funciones diversas, como encuestas con las que conocer mejor las opiniones de tus trabajadores o sistemas de recogida y gestión de información, que te permitirá una mejor gestión del talento.
¿Desea saber más?
Entradas relacionadas
En el mundo empresarial actual, donde la integridad y la transparencia son esenciales para construir confianza, las organizaciones…
La gestión de investigaciones internas en las empresas es clave para proteger la integridad empresarial, prevenir los riesgos y fortalecer la...
La estructura de ISO 42001 es la acostumbrada por ISO para sus estándares certificables, y con posibilidad de…